Oh Jesús, que en la tierra mandaste y practicaste una vida oculta,
Concede que estos nuestros días de orgullo
y lucimiento externo, el ejemplo de tu siervo Juan Neumann
nos conduzca a seguir Tus humildes caminos.
Concede, oh Señor, que como tu sano obispo
hagamos todas nuestras obras con la intención pura de agradarte,
y no permitas que nuestras obras sean hechas para ganar el favor de otros
sino para dar gloria a nuestro Padre en el cielo.
Te damos gracias que nuestro conciudadano y devoto obispo misionero
sea reconocido entre los santos de Tu Iglesia en el Cielo,
y te suplicamos, oh Señor, le glorifiques en la tierra
concediendo los favores que pedimos a través de su intercesión.
Amén.
Concede que estos nuestros días de orgullo
y lucimiento externo, el ejemplo de tu siervo Juan Neumann
nos conduzca a seguir Tus humildes caminos.
Concede, oh Señor, que como tu sano obispo
hagamos todas nuestras obras con la intención pura de agradarte,
y no permitas que nuestras obras sean hechas para ganar el favor de otros
sino para dar gloria a nuestro Padre en el cielo.
Te damos gracias que nuestro conciudadano y devoto obispo misionero
sea reconocido entre los santos de Tu Iglesia en el Cielo,
y te suplicamos, oh Señor, le glorifiques en la tierra
concediendo los favores que pedimos a través de su intercesión.
Amén.
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