La Luz y la Fuente de la Sabiduría

¡Ven, Santo Espíritu, Divino Creador,
verdadero origen de luz y fuente de sabiduría!
Derrama tu brillo sobre mi denso intelecto,
disipa la oscuridad que me cubre,
la del pecado y la ignorancia.

Concédeme una mente penetrante para entender,
una memoria retentiva, fácil para aprender,
la lucidez para comprender,
y abundante gracia en expresarme.

Guía el comienzo de mi trabajo,
dirige su progreso,
y llévalo a un final exitoso.

Te lo pido por Jesucristo,
verdadero Dios y hombre,
que vive y reina contigo
y el Padre, por los siglos de los siglos.


Amén.