Me Entrego a Ti

Yo, pecador infiel ?
renuevo y ratifico hoy en tus manos,
Oh Madre Inmaculada,
los votos de mi Bautismo;
y renuncio para siempre a Satanás,
sus pompas y sus obras;
y me entrego enteramente a Jesucristo,
la Sabiduría Encarnada,
para llevar mi cruz detrás de Él
todos los días de mi vida,
y serle más fiel
de lo he sido anteriormente.


Amén.