Oración por los Ancianos

Amado Señor,
a medida que mi vida declina
y mis energías disminuyen,
más que nunca sostenme por Tu Poder,
para que no te ofenda,
pero cada día crezca en Tu Amor.

Dame la fuerza para trabajar en Tu Servicio
hasta el último día de mi vida.

Ayúdame a tener siempre
un temor creciente al pecado venial,
o a todo aquello que cause
el más mínimo retiro de Tu amor,
durante todo el día,
y durante la noche mantenme cerca de Tu Corazón;
y si muriera, antes del amanecer,
permíteme regocijarme en esa visión
de Tu fascinante belleza,
para nunca separarme de Ti.


Amén.