Virgen llena de bondad,
Madre de Misericordia,
te confío mi cuerpo y alma,
mis pensamientos, mis acciones,
mi vida y mi muerte.
Oh mi Reina, ayúdame,
y líbranos de las trampas del demonio.
Obténme la gracia
de amar a mi Señor Jesucristo, tu Hijo,
con un verdadero y perfecto amor,
y después de él, oh, María,
amarte con todo mi corazón
y sobre todas las cosas.
Amén.
Madre de Misericordia,
te confío mi cuerpo y alma,
mis pensamientos, mis acciones,
mi vida y mi muerte.
Oh mi Reina, ayúdame,
y líbranos de las trampas del demonio.
Obténme la gracia
de amar a mi Señor Jesucristo, tu Hijo,
con un verdadero y perfecto amor,
y después de él, oh, María,
amarte con todo mi corazón
y sobre todas las cosas.
Amén.
Hashtag
Comentarios