Oración de San Juan XXIII, Papa

Oh, María, tú estás orando por nosotros,
Tú siempre estás rogando por nosotros.
Lo sabemos, lo sentimos.

Oh cuánto gozo y verdad,
cuán sublime gloria,
en este intercambio celestial y humano
de sentimientos, palabras y acciones,
que siempre nos trae el rosario:
la mitigación de nuestras aflicciones humanas,
el adelanto de la paz que no es de este mundo,
¡la esperanza de la vida eterna!


Amén.