Señor, Apresúrate a Socorrerme

Cuando no me siento bien,
y cansado, puedo deprimirme tanto,
con los demás,
conmigo mismo,
con todo,
mi espíritu se derrumba dentro de mí.

Me convierto en una flor en tierra árida,
desesperado por lluvia,
solamente deseando sentirme bien,
para gozar de nuevo de mi vida.

Señor, apresúrate a ayudarme,
envía las lluvias de Tu amor sobre mí,
para que como las flores se refrescan en la lluvia,
pueda levantar mi cabeza cabizbaja,
y regocijarme en Ti en su lugar.


Amén.

- Por el Padre Columbano Patrick Sayles