Venga Tu Reino

Quita todo el miedo de mi vida
y dame una fe fuerte como la de Abraham,
nuestro padre en la fe.

Al celebrar esta Eucaristía
espero en la esperanza gozosa del regreso del Maestro.

Dame lo que necesito cada día:
no me pongas a prueba.

Ayúdame a reconocer que nada en la vida
es más importante que la preparación para el encuentro final.

Líbrame de todo mal,
Pasado, presente y por venir.

Por el reino, el poder,
Y la gloria son tuyos,
ahora y por siempre.


Amén.