Ayúdanos a Vivir

San Miguel, tu Corazón estaba lleno
con gran caridad por Dios y el hombre.

Nuestro Señor retornó tu amor
y te permitió intercambiar místicamente
tu corazón con el Suyo.

Ruega por todos aquellos corazones afligidos
con enfermedad, temor, o soledad.

Enséñanos a resignarnos a la voluntad de Dios
en todas las pruebas y enfermedades.

Ayúdanos a vivir como tú viviste,
para hacer el bien ahora y por la eternidad.


Amén.