Bendita Ana Rosa

Bendita Ana Rosa Gattorno,
tu vida estuvo marcada por un sufrimiento continuo.

Notablemente, tu primer hijo quedó sordo
y con discapacidad mental tras una enfermedad repentina.

Más tarde, perdiste a tu esposo después de seis años de matrimonio
y luego a tu hijo menor.

Bendita Ana Rosa, los sufrimientos de tu vida
te acercaron a una comunión más íntima con Jesús.

Ruega para que nuestro sufrimiento aquí en la tierra
también dé frutos tan hermosos.

Ruega para que podamos poseer un fervor misionero,
fuerza y celo por servir a nuestros vecinos.

Ruega, Bendita Ana Rosa, para que nuestra fe se profundice
de modo que podamos enfrentar todos los obstáculos en nuestras vidas
con confianza y completo abandono a Jesús.

Te pedimos que presentes nuestras peticiones a Jesús
a los pies de la cruz.


Amén.