Luz para el Camino

Padre celestial, mientras caminamos
por los tranquilos senderos del Tiempo Ordinario,
recuérdanos que cada día es un regalo,
cada momento una oportunidad para crecer en gracia.

Que Tu Espíritu guíe nuestros pasos, y que permanezcamos
fieles a Tu voluntad incluso en los más pequeños detalles de la vida diaria.


Amén.