El Mundo está en Tus Manos

Bendito y alabado seas, oh Señor,
escucha nuestras oraciones y respóndenos.

Tú, nuestro Salvador,
Eres la esperanza de todos los confines de la Tierra
y los mares lejanos.

Que Tu camino sea conocido sobre la Tierra;
entre todas las naciones.

Ponemos el mundo en Tus manos;
llénanos con Tu amor.

Concédenos la paz por medio de Cristo, nuestro Señor.


Amén.