Querido San Damián,
cuando fuiste a Molokai, estabas preparado
para entregar tu vida al servicio de los demás.
Ayúdanos a comprender este amor cristiano
y a comenzar a desearlo para nosotros mismos.
Amén.
cuando fuiste a Molokai, estabas preparado
para entregar tu vida al servicio de los demás.
Ayúdanos a comprender este amor cristiano
y a comenzar a desearlo para nosotros mismos.
Amén.
Hashtag
Comentarios