Oración de San Ambrosio

Porque tienes misericordia de todos, oh Señor,
y no odias nada de lo que has hecho.
Recuerda lo frágil de nuestra naturaleza,
y que Tú eres nuestro Padre y nuestro Dios.

No te enojes con nosotros para siempre,
ni detengas Tus tiernas misericordias en disgusto.
Porque no es por nuestras justas obras
que presentamos nuestras plegarias ante Ti,
sino por la multitud de Tus tiernas misericordias.

Aleja de nosotros, oh Señor, nuestras iniquidades,
y misericordiosamente enciende en nosotros el fuego de Tu Santo Espíritu.
Aleja de nosotros el corazón de piedra,
y danos un corazón de carne,
un corazón para amarte y adorarte,
un corazón para deleitarse, seguir, y disfrutar de ti.

Y te suplicamos Tu misericordia, oh Señor,
Para que mires con gracia sobre Tu familia,
mientras cumple sus votos a Tu santísimo nombre;
y que el deseo de nadie sea en vano,
y las peticiones de ninguno sean incumplidas
inspira nuestras oraciones, para que sean
Tu deleite de escuchar y responder.


Amén.