Te Adoro

Jesús crucificado, acepta el homenaje
que deseo rendirte como muestra
de mi sincero aprecio
por las penas y sufrimientos
que has padecido voluntariamente
para expiar mis muchos pecados
y para demostrar cuanto me amas.

Te adoro como mí mismo Dios,
que quiso convertirse en Hombre
para salvarme de la muerte eterna.


Amén.