Tu Amorosa Presencia

Querido Jesús,
hay días que pueden ser bastante ocupados con tareas, reuniones,
responsabilidades familiares, demandas inesperadas,
casi sin tiempo para tomar aliento.

La ansiedad se vuelve agotadora.
Entonces, amado Señor, toca nuestros corazones, afloja el ritmo,
déjanos sentir Tu amorosa presencia.


Amén.


? Por el P. Columbano John Comiskey