Vigilantes del Señor

Oh Señor, nos llamas a cuidar las almas de los demás.

Que no permanezcamos en silencio ante lo incorrecto,
sino que hablemos la verdad con amor.

Fortalécenos para guiar con ternura a quienes se desvían
y aceptar humildemente la corrección,
para que podamos crecer juntos en santidad y unidad.


Amén.